Consagrando nuestro hablar

Muchas veces aunque recibimos al señor Jesucristo en nuestro corazón y vivimos consagrados a el, no entendemos por que suceden cosas, nos preguntamos ¿Qué pasa? y lo que es peor, a veces culpamos a Dios de las cosas negativas que nos suceden, pero casi siempre el problema es que pecamos des obedientemente con nuestra boca y activamos cosas negativas con las palabras, y lo vamos a comprobar con la palabra de Dios, en efesios 4:29 dice así: Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. 
Proverbios 15:14: El corazón entendido busca la sabiduría; Mas la boca de los nécios se alimenta de necedades.
Podemos ser personas que no andamos en el pecado del mundo, pero si no refrenamos nuestra boca, de hablar mal, negativamente o de quejarse continuamente en lugar de adorar a Dios, aún en tiempo de prueba o dolor, significa que necesitamos renovar nuestro corazón a la obediencia de la palabra que nos exhorta diciendo: De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. Santiago 3:10
También en Proverbios 13:3 nos dice así: El que guarda su boca guarda su alma; 
Mas el que mucho abre sus labios tendrá calamidad.
Pero la pregunta es: ¿Cómo puedo lograr cambiar, si lo he intentado sin ningún resultado.
Salmo 141:3 dice: Pon guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios.
-Si somos hijos de Dios debemos obedecer a su palabra, Colosenses 3:16, En Cristo, la palabra vive en ti como un rico tesoro. Enseñar y corregir a los demás con sabiduría. NVI .
-Arrepentirnos y desatarnos de toda palabra que en algún momento hablamos contra Dios o contra nuestro prójimo, está escrito en Proverbios 25:18 Martillo y cuchillo y saeta aguda  Es el hombre que habla contra su prójimo falso testimonio. 
Está claro que si queremos ser salvos, debemos cuidar nuestra boca y tomar la decisión de que El Espíritu Santo dirija nuestro hablar diario, comienza hoy, luego mañana, hasta que se convierta en un estilo de hablar, Jesús dijo: El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida. Juan 6:63.
Cada vez que siembras una palabra, es una semilla que dará fruto.
La muerte y la Vida están en Poder de la lengua y el qué la ama Comera de Sus Frutos. Proverbios 18:21

Consejo: Toma todos los versículos de ésta enseñanza y lee uno diario para que te ayude a fortalecer ésta área de tu vida hasta haberla superado. ¡Bendiciones!


Lucia Navarro Flores
Ministerio Guia-2